Número cuatro: Se retiró casi de forma permanente de la actuación
Ruffalo se retiró a su casa donde permaneció en el exilio autoimpuesto, rechazando a colegas y amigos por igual. Mark no podía aceptar el hecho de encontrarse impedido para trabajar y sus médicos le daban pocas o ninguna esperanza de recuperarse. Ruffalo admitió que después de meses de parálisis, las posibilidades de recuperar el control sobre toda su cara eran remotas. Sin embargo, superó las probabilidades: después de seis meses de pudo hacer movimientos muy leves, lo que era el comienzo de una recuperación que aún tomaría varios meses más.
Número cinco: Un proceso doloroso de curación
Hacer frente a la parálisis resultó bastante difícil, pero el camino hacia la recuperación planteaba nuevos desafíos. Por un lado, ganó mucho peso después de su operación. Además, los medicamentos recetados resultaron en una pérdida de equilibrio. Si bien el actor describió este efecto secundario como algo cómico, también explicó que limitaba su capacidad para ayudar a cuidar a sus hijos.También estaba confundido y tenía dificultades para entender conceptos básicos como atar un nudo. Con respecto a sus experiencias antes y después de su operación, Ruffalo dijo que se centró en tratar de mover los músculos de su cara durante aproximadamente una hora todos los días. También caminaba cada día. Estas dos cosas ayudaron a acelerar su recuperación. Como resultado de la parálisis, el actor permaneció fuera del ojo público durante aproximadamente un año para centrarse en su salud. Aunque quería volver a la actuación, sus médicos le aconsejaron encarecidamente que no lo hiciera. Durante su diagnóstico y recuperación, con la excepción de sus amigos y familiares cercanos, mantuvo en secreto los detalles sobre su condición. "No quería ninguna visita", recordó. "Estaba en un estado increíblemente miserable, y lo que fue peor fueron las reacciones de la gente al verme. Fue muy duro para ellos."
Número seis: Una muerte en la familia
Desafortunadamente, el mejor amigo de Ruffalo no es la única persona cercana a él que falleció de manera inesperada. De acuerdo con Los Angeles Times, el 8 de diciembre del 2008, el hermano de Mark, Scott, murió después de que le dispararon en la cabeza en su propia casa. Inicialmente parecía que Scott podría haber muerto debido a un percance jugando a la ruleta rusa, pero con el tiempo el caso fue declarado como un homicidio.
El asesinato de Scott Ruffalo sigue sin resolverse.
Después de la muerte de su hermano, Mark decidió tomarse un descanso de Hollywood. En su entrevista con The Telegraph, Ruffalo declaró que había estado considerando retirarse desde antes de la muerte de Scott, debido a su creciente desilusión con Hollywood. "Que mi hermano muriera fue lo último que me faltaba. Me recordó que la vida es corta y que será mejor que hagas lo que quieras mientras tienes una oportunidad”. Ruffalo despidió a su agente y publicista, dejó su apartamento en Los Ángeles y se mudó a una casa aislada en el norte del estado de Nueva York con su esposa y sus tres hijos.
Aún así, Ruffalo no pudo separarse por completo del estilo de vida de Hollywood. De hecho, hizo su debut como director en 2010.
Ruffalo explicó que la meditación lo ha ayudado a sobrellevar su ansiedad. Descubrió sus beneficios a través de un amigo que superó la adicción a las drogas gracias a un programa de meditación; viendo los cambios positivos en otra persona, Mark se abrió a la práctica de la meditación, que él acredita pudo cambiar completamente su perspectiva.
"Es una práctica diaria que calma tu cerebro y, curiosamente, en realidad ralentiza el tiempo, por lo que no estás tan atrapado en tus reacciones inmediatas a las cosas", explicó. "Mi trabajo comenzó a cambiar mi suerte comenzó a cambiar. La forma en que miraba el mundo cambió."
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